Propuestas
Contribution of the French Collectif Rio+20 to the Rio+20 Summit Cambio de paradigma: contribución del Colectivo francés Río+20
Detalles de la propuesta
Contexto

También disponible en English, Français

 

La presente declaración de la coordinadora Rio+20 (Collectif Rio+20) es el resultado del trabajo en común de alrededor cincuenta organizaciones francesas, ONG, movimientos sociales y sindicales, que llevan adelante después de un año una amplia tarea de reflexión sobre el contenido y la preparación de Rio+20. Nuestra ambición es sostener, al interior de las negociaciones y de los diversos encuentros de la sociedad civil, proposiciones que conduzcan a sociedades más justas y sostenibles. En este periodo crucial para la humanidad, es importante que la conferencia de Rio reúna todos los gobiernos y organizaciones multilaterales al más alto nivel y sea receptivo al dialogo con los ciudadanos.

 

Participan al trabajo común de la coordinadora Rio+20: 4D, ADOME, AEEOG, Agir pour l’environnement, AgriSud, Aitec-Ipam, Artisans du Monde, Association des Populations des Montagnes du Monde, Association Entreprendre Vert, Association française des Petits Débrouillards, Attac, CCFD-Terre Solidaire, Centre de Recherche en Sustainability Sciences de l’Université de Reims, CFDT, CFSI, CGT, Comité 21, CRID, ENERGIES 2050, Etudiants&Développement, Fondation Charles Léopold Mayer pour le Progrès de l’Homme, Fondation Sciences Citoyennes, Forum pour une nouvelle gouvernance mondiale, France Libertés, France Nature Environnement, Global Chance, GRET, Groupe de contact Genre et développement soutenable, HELIO International , IATEUR, IDD, IGAPURA, Institut Veblen, Ligue de l’Enseignement, Ligue Internationale des Femmes pour la Paix et la Liberté, Littocean, Marche Mondiale des Femmes-France, Mouvement Utopia, Orée, P’ACTES LOCAUX, RAC-France, RARE, REFEDD, Réseau Ecole et Nature, Réseau environnement et santé, Secours Catholique, Syndex, SYNERGENCE, UNAF, VECAM, VivAgora.

 

A nivel internacional, sostienen la declaración: One Earth Initiative, ENDA Europe, Réseau Climat et Développement, Jeunes Volontaires pour l’Environnement.

 

Propuestas y resumenes

 

1- UNA NUEVA VISIÓN DEL DESARROLLO PARA LA TRANSICIÓN ECOLÓGICA Y SOCIAL DE LAS SOCIEDADES ACTUALES

 

Con la voluntad de avanzar hacia nuevos modelos de desarrollo que integren de manera explícita objetivos económicos, sociales, culturales y ecológicos, planteamos la necesidad de una transición que conduzca a una mejoría de la calidad de vida para todos, coherente con los límites del planeta. Se trata de un cambio de civilización basado en la definición de nuevos valores universales, centrados sobre el interés general y el reconocimiento de la diversidad de pueblos. Así, la Conferencia de Rio en 2012 deberá realmente aportar una nueva visión del desarrollo y de la prosperidad e indicar las formas de alcanzarla, en los países del Norte como en los del Sur.

 

Responder plenamente a este gran desafío implica transformar las sociedades actuales de manera sustancial, apoyándose sobre la totalidad de sectores sociales y sobre democracias sólidamente constituidas. La abertura es estrecha. La búsqueda de soluciones a las múltiples crisis actuales y a la elección del modelo de desarrollo a construir, exigen una hoja de ruta al horizonte 2020 y más allá. Así, la Conferencia de Rio+20 deberá pronunciarse sobre dos desafíos fundamentales:

  • La transición ecológica y social de nuestras sociedades (y de nuestro sistema económico) y el pasaje hacia sociedades post-petróleo, post-energías fósiles y sobrias en recursos naturales;
  • La construcción de una nueva gobernanza mundial, esencialmente fundada en la responsabilidad de los Estados y en la consulta de una sociedad civil activa, tanto a nivel local como internacional.

 

La Conferencia deberá fijar una hoja de ruta 2012-2020 que especifique las modalidades de dialogo así que el proceso de decisión y la manera de implementarlo.

 

2- LA GARANTÍA DE PRINCIPIOS COMUNES A TODA LA HUMANIDAD EN LA DECLARACIÓN DE RIO+20

 

La coordinación RIO+20 solicita que la declaración de Rio+20 asegure como principios fundamentales:

  • El respeto de los equilibrios ecológicos, la estabilización del clima y la protección de la biodiversidad (marina y terrestre) a un nivel que permita:
    • garantizar a todas las poblaciones el acceso al agua, a la energía y a la alimentación;
    • evitar los desastres ecológicos.

 

Ello se logrará mediante la construcción de marcos apropiados de gestión local, nacional, regional y mundial, basados a nivel internacional sobre los principios del multilateralismo y de la responsabilidad compartida pero diferenciada.

 

  • La erradicación de la pobreza y la reducción de las desigualdades a través de la reafirmación de los Objetivos de desarrollo del Milenio, la definición de nuevos objetivos para el periodo posterior a 2015 y los mecanismos de redistribución de las riquezas, con indicadores y fondos coherentes;
  • La aplicación efectiva de la promesa de los países desarrollados de asignar al menos 0,7 % de su ingreso nacional bruto a la ayuda pública para el desarrollo, priorizando más bien las donaciones que los préstamos;
  • El derecho a la alimentación y a la soberanía alimentaria de todos los pueblos, sosteniendo el desarrollo de prácticas alternativas a la agricultura industrial, tales que la agricultura campesina, la agricultura familiar, la agricultura ecológica y la agro-silvicultura;
  • La consideración de los límites del planeta (que pasa por un conocimiento más amplio de los recursos y los riesgos naturales) a través de la reafirmación del principio de sustentabilidad ecológica y la definición de nuevas obligaciones relativas al medio ambiente;
  • El reconocimiento de bienes fundamentales (aire, tierra, agua, energía) como bienes comunes que requieren una gestión local conforme a principios democráticos, que garanticen la sobriedad y el acceso a todas las poblaciones;
  • La prevención de enfermedades crónicas, problema a la vez sanitario, de desarrollo y de políticas públicas;
  • La implementación del principio de subsidiaridad con la finalidad de integrar mejor las preocupaciones económicas, sociales, ecológicas y los intereses de las poblaciones en las decisiones políticas. Todo esto, en el contexto de un proceso democrático que interese activamente los ciudadanos y responda a las nuevas necesidades de manera eficaz;
  • La revalorización del principio 10 de la Declaración de Rio 92 acerca del derecho a la transparencia, del acceso a la información, de la necesidad de comprensión de informaciones complejas (técnicas y científicas), de la participación pública en los procesos de decisión y del acceso a la justicia, apoyándose en los diferentes medios de comunicación y respondiendo a exigencias democráticas;
  • El reconocimiento de saberes locales y de diferentes formas de evaluación científica y ciudadana, capaces de producir conjuntamente nuevos conocimientos y competencias, con la intención de articular la reflexión y la acción a nivel local y global, y de facilitar el reconociendo y el apoyo institucional a experiencias colectivas, que reconstruyen o crean formas de producción, de utilización y de consumo locales;
  • La aplicación de las reglas de la Oficina internacional del trabajo sobre el trabajo decente y la creación de la protección social universal;
  • La afirmación de la transparencia de las empresas, en particular de los grupos transnacionales, en materia fiscal, social y ambiental.

 

3- Nuestras expectativas sobre los grandes desafíos mundiales, principios y proposiciones

 

Principio: un cambio de paradigma

 

La humanidad alcanzaría unos 8 mil millones de individuos en 2030 y 10 mil millones en 2050. Este crecimiento demográfico tendrá lugar principalmente en los países en desarrollo y en zonas urbanas. Resulta posible hacer frente, de manera justa y sostenible, a la demanda creciente de alimentación, de energía, de salud y a otras necesidades (materiales e inmateriales) de esta población. Para ello, es necesario realizar un profundo cambio de paradigma y cuestionar el modelo de sobreconsumo y de acaparamiento de recursos por parte de una minoría, con la intención de dirigirse hacia sociedades de reparto, fundadas en los principios de sobriedad y de distribución equitativa.

 

Enverdecer una simple política comercial ignorando la profundidad de las desigualdades y de las crisis financieras, sanitarias, sociales y ecológicas así que la complejidad y la interdependencia de los ecosistemas solo aportará una solución parcial e ineficaz a corto plazo. Necesitamos una transición ecológica y social que se apoye en políticas de investigación e innovación adaptadas y que no respondan de manera exclusiva a intereses privados. Necesitamos igualmente que las empresas acompañen esta evolución, modificando sus modelos de producción, de organización del trabajo y de gestión.

 

Proposiciones para la implementación de este principio:
  • Privilegiar la construcción de sociedades sostenibles que concilien la búsqueda del bienestar general y la utilización reflexiva de recursos naturales asegurando así la preservación del planeta;
  • Reforzar las políticas nacionales favorizando una mayor igualdad de salarios, una mejor distribución de riquezas y una justa retribución del trabajo;
  • Pensar una economía funcional que favorezca más bien el acceso al conocimiento y a la utilización de los bienes de consumo a todas las personas que la propiedad personal y la sobreproducción;
  • Desarrollar circuitos cortos, principalmente en los sectores de la alimentación y de la energía y asegurarse que los circuitos largos garanticen una justa remuneración de los productores y un impacto reducido sobre los recursos naturales y el medio ambiente;
  • Desarrollar patrones de consumo colectivos y aplicar medidas de eficacia energética (de preferencia renovables) así que medidas de protección de los bienes comunes, accesibles a todos;
  • Preservar los bienes comunes, apoyándose sobre grupos de usuarios que definan las reglas de conservación y de acceso a los bienes naturales necesarios a la vida, como forma de sobrepasar una visión de mercado que ignora las demandas sociales y los límites del medio ambiente;
  • Apoyar la colaboración entre la sociedad civil y los gobiernos con el fin de posibilitar una gestión eficaz de los recursos naturales, justa y adaptada a la diversidad de contextos locales;
  • Poner en marcha una gobernanza local a diversos niveles, tomando en cuenta que la descentralización también pasa por el reconocimiento del rol importante de la sociedad civil;
  • Priorizar, en lo que concierne la gestión de los recursos naturales, la satisfacción de las necesidades vitales, tales que la alimentación, combatiendo el acaparamiento de tierras y la sobreexplotación de recursos;
  • Redefinir y redistribuir los roles sociales de hombres y mujeres de manera igualitaria: cuidado de los hijos y de las personas dependientes, reparto de tareas, educación, etc. Esto implica que la sociedad y los servicios públicos asuman una parte trabajo casi exclusivo y gratuito de las mujeres en ese dominio.

 

Principio: revalorizar el rol de la regulación

 

No puede haber una reducción de desigualdades y una inversión conforme a los objetivos de sostenibilidad sin una definición de nuevos indicadores de gestión del planeta y de bienestar económico y social y sin revalorización de la fiscalidad y de la noción de inversión social y ecológica.

 

(Ver el documento completo a continuación.)

 

Actores
Regiones
Enlaces y vinculaciones externas o internas

Collectivo francés Río+20