Documentos
¿Catastrofe o Nueva Sociedad? Modelo Mundial Latinoamericano ¿Catastrofe o Nueva Sociedad? Modelo Mundial Latinoamericano

 

En el mundo actual hay una serie de indicios que nos llevan a ser pesimistas con respecto a su futuro. Nos muestran un mundo amenazado por la pobreza, la exclusión el hambre y las enfermedades. El Modelo Mundial Latinoamericano, realizado por la Fundación Bariloche entre 1972 y 1975, hace ya más de 30 años, mostró un camino posible hacia un mundo mejor, más equitativo, de plena participación y no consumista.

 

Surgió como respuesta de un grupo de pensadores al mensaje contenido en el modelo propuesto en MIT, “Limites al Crecimiento” (1972) que sostenía que los límites al crecimiento eran físicos y que la salida a un futuro catastrófico era a través de la reducción del crecimiento de la población y la restricción al crecimiento de la economía mundial Esta nueva edición que surge de una iniciativa del IIED-AL apoyada por el IDRC consta de una primera parte introductoria donde tres de los autores analizan el modelo desde una perspectiva histórica y una segunda parte que reproduce la primera edición original en español.

 

En la primera parte, Oteiza enfatiza lo que significó en la Argentina del ′70 la postura ético-política de sus autores y la construcción desde la periferia de un modelo mundial alternativo al hegemónico. Gallopin reflexiona sobre el rol e importancia de las cosmovisiones e ideologías y Scolnik señala cómo las técnicas matemáticas se pueden y deben usar como herramientas para el diseño de políticas.

 

La segunda parte, edición original, desarrolla una propuesta conceptual de sociedad ideal donde se establecen las metas deseables a alcanzar en un mínimo tiempo y luego la verificación a través de la modelización. Uno de sus aportes más significativo es incorporar el concepto de necesidades básicas como indicador y utilizar una función de producción con sustitución entre capital y trabajo.

 

En el análisis de los obstáculos los autores sostienen que éstos son esencialmente sociopolíticos y relacionados con la distribución del poder, tanto a nivel internacional como dentro de cada país. La crisis que se enfrenta es universal. En este sentido la aplicación del modelo aportaría los prerrequisitos para la generación de un orden mundial realmente solidario, cuyo emergente sería “la integración en una sociedad cosmopolita que constituya la expresión de la conciencia unificada de la humanidad”.  El llamado a la solidaridad global para una sociedad equitativa y participativa continúa sin respuesta. A la luz del tiempo transcurrido, y con el beneficio del conocimiento actual, el mensaje central del modelo todavía es válido.

 

Presentación

 

La idea de favorecer la reincorporación de este material como referencia para el debate público, aproximadamente un cuarto de siglo después de la publicación de su versión original, posee plena justificación desde nuestra perspectiva. Por un lado resulta una condición suficiente el poder disfrutar de la revisión aportada por algunos de los miembros del equipo original de trabajo. Su reflexión madurada durante el tiempo transcurrido, y aún suficientemente transgresora, estimulan a la lectura de un libro que mantiene plena vigencia en sus contenidos, en su enfoque y en sus objetivos. La solidez del ejercicio de reflexión inicial continúa firme ante la posible caducidad aportada por el pasar del tiempo. La perspectiva sistémica y la proyección de un modelo de sociedad deseable usada en los análisis defienden sus contenidos ante la tentación al olvido frente al arribo de nuevos aires de catástrofe a nivel global o al desaprovechamiento frente a la emergencia de nuevos espacios y necesidades para la reflexión crítica. Pero es justamente ante este cambio en la disposición de nuevos espacios abiertos para esta reflexión, sin los riesgos que muchos de los investigadores que participaron en la elaboración de estos estudios debieron asumir, en momentos de obscurantismo y represión, que resulta una condición sin duda necesaria el favorecer la recuperación de esta parte de la memoria en la construcción de un conjunto de señales y advertencias como ayuda para la decisión en el actual cruce de caminos entre “Catástrofe o Nueva Sociedad”.

 

Muchas de las tensiones que se identifican hoy en día en el proceso de aumento de las interacciones y dependencias a nivel global parecen haber cambiado desde la edición original del libro. El momento parece estar pautado por la existencia de acciones y de discusiones que intentan consolidar una nueva geopolítica de espacios regionales, y con ello, un nivel de influencia multipolar de las relaciones entre países y entre bloques de países. Los espacios regionales han avanzado en este período con firmeza, consolidando bloques de poder económico, político y militar mediante esfuerzos para la construcción activa de un sistema de valores compartidos entre los países y los colectivos sociales que los integran. Esos valores a su vez son utilizados cada vez más como justificación en el diseño e implementación de nuevas políticas públicas comunes, destinadas a facilitar y gestionar una correcta integración en la escala global de estos bloques. A pesar de la aceleración de estos cambios dentro de los procesos regionales de apertura en la búsqueda de alternativas de desarrollo social y económico y en un marco de mayor interdependencia internacional, también parece haberse mantenido con plena vigencia un importante conjunto de dificultades que condicionan las transformaciones del marco institucional y su rol como favorecedor de una mejor integración social en la adaptación a la apertura hacia el mayor relacionamiento e interdependencia global.

 

La mejora de la capacidad de las sociedades organizadas en Estados-Naciones para gestionar en forma incluyente el conjunto de transformaciones necesarias resulta una condición crítica para conservar el sentido de la democracia en esa escala territorial. La capacidad de las sociedades de pensar a largo plazo, revisando la evidencia existente para entender las oportunidades y las dificultades que ofrecen el contexto doméstico y el global en la construcción de escenarios deseados y en el diseño de medidas de aproximación a esos modelos, representan la base para asegurar las condiciones necesarias de estabilidad interna en un proceso de cambio hacia una nueva sociedad.

 

De esta forma, en tiempos en que la comunidad internacional busca consolidar un marco de acciones integradas a nivel global, para poder avanzar con el compromiso de los Estados-Naciones en los Objetivos de Desarrollo del Milenio y llegar al año 2015 con una reducción a la mitad en las cifras actuales de la pobreza considerada como extrema, es que mantiene vigencia la contribución de este libro destinada a entender las causas y las dificultades para las transformaciones necesarias hacia una nueva sociedad.

 

Es este el desafío que IDRC junto al IIED asumen facilitando la reintegración de este libro en los espacios de debate abierto y público, en la necesaria construcción de ideas y fertilización de nuevas políticas públicas con el aporte de la evidencia existente en el conjunto de indicadores oportunamente identificados por los autores de este libro como señales para transitar hacia una nueva sociedad.

 

 

Regiones